
Los cambios incluyen lineamientos sobre ciberseguridad, acceso remoto, supervivencia y más
nfpa.org/72next
Nunca construirás una cerca de jardín que sea completamente impenetrable—pero mientras que la tuya sea mejor que la de tus vecinos, es probable que los conejos vayan a alimentarse a otra parte. Es una buena regla general para los jardineros, y también para la ciber seguridad, un ámbito en el que los proverbiales conejos son cada vez más creativos y agresivos en todo momento.
En reconocimiento de los ataques maliciosos cada vez más frecuentes a edificios y sistemas, NFPA 72®, Código Nacional de Alarmas de Incendio y Señalización, incluirá lineamientos sobre ciberseguridad para alarmas de incendio en su próxima edición, que se publicará a finales de año. Es la primera vez en su larga historia que el código aborda el tema.
Si bien el concepto de que una alarma necesite ciberseguridad podría haber sido algo de difícil de comprender hace tan solo una década, como se detalla en el artículo de portada de NFPA Journal en Español de marzo 2021, «Puntos débiles«, las alarmas y otros sistemas conectados de los edificios se han convertido en objetivos populares para los ciberdelincuentes en los últimos años. Los piratas informáticos vulneran cada vez más los sistemas de seguridad y otros sistemas para acceder a los servidores y otros objetivos sensibles, donde pueden instalar ransomware (secuestro de archivos a cambio de un rescate), o simplemente robar datos y venderlos. Las pérdidas mundiales por este tipo de ataques ascienden a miles de millones de dólares anualmente.
En lugar de incluir una lista exhaustiva de requisitos de ciberseguridad en el código principal, el comité de NFPA 72 optó por adoptar un enfoque más flexible y poner la información en un nuevo anexo. Eso significa que, en lugar de estar obligados a cumplir una norma mínima, los usuarios pueden seleccionar el nivel de seguridad que creen que necesitan y usar el anexo para aprender cómo conseguirlo. «Es como una evaluación de riesgos y una hoja de ruta de lo que es necesario hacer si alguien quiere obtener un determinado nivel de ciberseguridad razonable», dijo Richard Roux, especialista principal de NFPA y personal de enlace de NFPA 72.
Este enfoque fue necesario debido a que sonmuchos los factores únicos que hacen que la ciberseguridad sea matizada y situacional, dijo Roux. Al igual que la cerca de jardín, lo alto o lo contundente de la construcción de sus defensas puede depender de diversos factores, entre lo que se incluye lo que está protegiendo, qué importante sea como objetivo y en qué sector de la industria esté. Todo eso «hace que sea complejo saber dónde trazar la línea» al momento de elaborar una norma, expresó Roux. «Es muy difícil decir: ‘Este requisito hará que el sistema sea inmune a un ciberataque o que sea menos probable que el sistema sea atacado’».
Además del anexo, el comité también incluyó un breve capítulo nuevo sobre ciberseguridad. Consta de un único enunciado, un enunciado que informa a los usuarios que la ciberseguridad «debe ser provista a equipos, software, firmware, herramientas», etc., donde sea requerido por leyes, códigos o normas aplicables.
La iniciativa de proveer lineamientos sobre ciberseguridad surgió de los comentarios del público que el comité de NFPA 72 recibió el ciclo pasado. Cuando el comité convocó a este ciclo, formó un grupo de trabajo para evaluar la materia, y el tema no tardó en despertar interés. «Los usuarios del código y algunos de los miembros de nuestro comité trabajan para empresas que han sido hackeadas, por lo que este tema estaba en la punta de sus lenguas», dijo Roux sobre el interés. «Se ha convertido en algo importante para la gente, sobre todo para aquellos que han sido vulnerados por un pirata informático. Saben que puede ocurrir y que puede tener consecuencias significativas».
Acceso remoto
En relación con el asunto de la ciberseguridad, aunque por separado, el comité ha añadido un texto que admite específicamente el acceso remoto a los sistemas de alarma y señalización de incendios para llevar a cabo distintas tareas, como reconfiguración, silenciamiento, realización de diagnósticos y actualización del software. Anteriormente, el código no se pronunciaba al respecto.
La autorización expresa se incluyó en reconocimiento de que el acceso remoto a las alarmas es algo que ya sucede extensamente, dijo Roux. De hecho, cree que una mayoría de las alarmas están actualmente conectadas de alguna manera ya sea a Internet, o a una infraestructura de comunicaciones o bien a alguna otra plataforma de centralización, lo que permite a los fabricantes instalar actualizaciones y a los técnicos monitorear y mantener los equipos. «El hecho es que, si los fabricantes tienen que corregir una falla, no quieren que cientos de técnicos salgan a llevar a cabo actualizaciones en 2,000 alarmas. Quieren hacerlo todo pulsando un botón en sus oficinas», expresó Roux.
Si bien esta conectividad es conveniente, las conexiones con el exterior efectivamente crean vías de entrada para los piratas informáticos, lo que hace que las medidas de ciberseguridad y los nuevos lineamientos de NFPA 72 sean aún más oportunos, dijo Roux. «Vemos que las dos cuestiones se enfrentan entre sí. En cierto modo son contradictorias, pero ambas son importantes», dijo.
Etiquetado por colores
En algunas jurisdicciones, los técnicos utilizan un sistema de etiquetado codificado por colores en la unidad de control de la alarma para que los usuarios y el público sepan si la alarma está funcionando correctamente. El verde significa que todo está bien, el amarillo que funciona pero está afectado y el rojo significa que no está funcionando apropiadamente. En la nueva edición, el comité decidió añadir material anexo con lineamientos sobre cómo adoptar este sistema de transparencia si las jurisdicciones están interesadas en hacerlo.
«La adopción de esto es puramente estado por estado o de jurisdicción por jurisdicción», dijo Roux. «El código nunca ha tratado esto antes, pero la gente pregunta sobre esto todo el tiempo, y por eso el comité decidió incluir algunos lineamientos nuevos».
Supervivencia
En muchos edificios, NFPA 72 requiere que el cableado y los componentes de un sistema de alarma y señalización sobrevivan a un incendio durante dos horas (o más) para que continúe cumpliendo su función. En casos específicos, sin embargo, el comité ha decidido reducir esa certificación a una hora en la próxima edición. El cambio se aplica mayormente a situaciones donde el edificio mismo tiene una certificación de construcción menor y no necesariamente amerita un requisito de supervivencia de dos horas. «Aunque NFPA 72 es un código mínimo, no es necesariamente la respuesta correcta», dijo Roux sobre el requisito de dos horas. «El comité fue proactivo, y la disposición es muy limitada en cuanto a lo que se aplicará, pero es significativa. Esto puede representar un ahorro de costos en esas situaciones».
Detectores de criterios múltiples
Como señal de un inminente e importante cambio en la tecnología de los detectores de humo, el comité eliminó muchas de las referencias del código a la detección por ionización y fotoeléctrica, las tecnologías que han dominado el mercado durante años. Eso se debe a que, hace dos años, UL anunció que estaba modificando sus normas de listado de alarmas, a fin de incluir solamente las que puedan pasar una serie de pruebas que demuestren que no se activarán por el humo de la cocina u otras causas de falsas alarmas. Como resultado, a fines de junio de 2022, cuando la norma UL entre en vigor, los únicos detectores del mercado serán probablemente detectores que puedan pasar esta prueba—detectores que NFPA 72 ahora denomina detectores «de criterios múltiples».
«Dentro de diez años, los términos ‘ionización’ y ‘fotoeléctrico’ dejarán de ser utilizados», afirmaba Roux. «En esta revisión del código, el comité cambió muchas de las disposiciones donde se utilizaban los términos y eliminó gran parte de la discusión relativa a la fotoelectricidad y a la ionización».
NFPA 13
Se destacan como próximos cambios la densidad de los rociadores, el almacenamiento en estanterías y la protección de los fosos de ascensores
nfpa.org/13next
Durante décadas, NFPA 13, Norma para la Instalación de Sistemas de Rociadores, ha instruido a los diseñadores e instaladores de rociadores sobre el uso de lo que se conoce como curva de densidad/área para calcular la densidad de los rociadores—la medida del volumen de agua liberada en una determinada cantidad de tiempo sobre un área específica. Dadas las clasificaciones de los grupos de riesgo, los usuarios podrían elegir cualquier densidad a lo largo de una curva. Pero un cambio previsto para la edición 2022 de NFPA 13 eliminaría el método de cálculo de la densidad por curva para los nuevos sistemas de rociadores y lo sustituiría por un método de cálculo de la densidad en un solo punto.
Ese es solamente uno de los cambios propuestos para la próxima edición de NFPA 13. Otro de los cambios previstos pondría límite a la profundidad de las estanterías en instalaciones de almacenamiento, mientras que el consabido debate sobre rociadores en fosos de ascensores va a ser desarrollado en la Reunión Técnica de la Asociación de 2021.
Source: https://nfpajla.org/archivos/edicion-impresa/nfpa-desarrollo-adopcion-de-normativa/1903-clase-de-2022

Un cambio propuesto es la limitación de la profundidad de las estanterías de almacenamiento de hileras múltiples a 20 pies. |
El cambio de las curvas de densidad/área a un método de un solo punto sería el cambio más significativo de la norma, según Chad Duffy, personal de enlace de NFPA para NFPA 13.
«Nos estamos alejando de esas curvas y acercándonos a puntos de densidad/área muy específicos», dijo Duffy, y agregó que las curvas fueron creadas basándose en datos que tenían hasta 50 años de antigüedad. «Así que ya no se podrá elegir cualquier punto a lo largo de la curva. La mayoría de los miembros del comité técnico creen que esta es probablemente la mejor dirección a seguir, especialmente en lo que respecta a autoridades competentes. Muchas personas realmente no entendían cómo se podrían utilizar los diferentes puntos de la curva. Esto lo aclarará y lo hará más sencillo para las autoridades competentes».
Además de simplificar la norma, Duffy dijo que el cambio eliminaría cualquier duda de que cada punto único de una curva se traduciría, de hecho, en un sistema de rociadores que funcione como debería. «No todos los puntos de estas curvas estaban probados», expresó. «Una gran parte de la curva puede haberse interpolado a partir de unos pocos puntos de datos. No creo que tengamos ningún tipo de datos históricos de incidentes de incendio en con los que pudiéramos decir que utilizamos una curva de densidad y que el sistema de rociadores no controló el incendio como estaba diseñado. Pero al pasar a un método de densidad de un solo punto, se elimina cualquier incertidumbre que podría existir con la interpolación de las curvas».
No todos están de acuerdo con el cambio. «Las curvas nos han funcionado desde la década de los setenta», escribió Larry Keeping, ingeniero en protección contra incendios y miembro del comité de Criterios de descarga de los sistemas de rociadores de NFPA 13, en un comentario público presentado en abril de 2020. «Me viene a la mente el viejo adagio ‘Si no está roto, no lo arregle’».
El comité respondió diciendo que «la intención del enfoque de densidad de un solo punto ha sido mejorar el desempeño de los rociadores seleccionando la más alta densidad de descarga posible».
Más allá de la densiddad de un solo punto
Se prevé un segundo cambio, dijo Duffy, para la edición 2022 de NFPA 13 es la limitación de la profundidad de las estanterías de almacenamiento de hileras múltiples a 20 pies—en un intento de evitar la propagación del fuego en los almacenes. Actualmente, la norma no establece un límite para la profundidad de las estanterías de hileras múltiples.
«Sin limitación, la preocupación es la propagación horizontal del fuego a través de estas estanterías de hileras múltiples», dijo Duffy. «Si tienes rociadores elevados que protegen estanterías de hileras múltiples y son extremadamente profundas y tienes todo ese producto en varios niveles, los rociadores podrían estar resguardados».
Representantes de la industria de las estanterías se oponen al cambio propuesto. «Este cambio, tal y como está redactado actualmente, clasificará a casi todas las estanterías de hileras múltiples en todos los almacenes como si tuvieran estantes sólidos. Por lo tanto… habría un requisito de rociadores en estanterías debajo cada nivel de almacenamiento de palés», escribió Gary Smith, miembro del comité de Criterios de descarga de sistemas de rociadores de NFPA 13, que también es vicepresidente sénior de ventas y marketing del fabricante de estanterías DACS, Inc., en un comentario público en abril de 2020. El cambio sería costoso y conduciría inevitablemente a más colisiones entre montacargas y rociadores, añadió Smith.
A pesar de esa oposición de la industria, Duffy dijo que no se presentó ninguna notificación de intención de hacer una moción (notice of intent to make a motion o NITMAM) por parte del sector de las estanterías.
Hay varias NITMAMS, sin embargo, relativas a un asunto que ha surgido muchas veces anteriormente, durante los ciclos de NFPA 13, dijo Duffy, y es el debate sobre si se deben requerir rociadores en los pozos de ascensores, el área más baja de un foso de ascensor. La edición vigente de la norma requiere rociadores en los pozos de ascensores.
El argumento a favor de los rociadores se basa en la idea de que en los pozos de los ascensores pueden acumularse muchos residuos, y a veces incluso líquido hidráulico, lo que crea un peligro de incendio. El argumento en contra de los rociadores, que es el argumento que apoya en gran medida la industria de los ascensores, es que los instaladores e inspectores se ponen innecesariamente en peligro cuando tienen que ingresar en los pozos de los ascensores. «Quieren reducir la cantidad de personas que tienen que entrar en esos pozos y trabajar, en función de los datos sobre accidentes», dijo Duffy. «No ven un historial de incendios en los pozos de ascensores».
Duffy dijo que no tenía certeza sobre el resultado del debate durante la reunión técnica, pero es algo en lo que los miembros del comité están acostumbrados a participar. «Tenemos este argumento sobre ascensores ciclo tras ciclo tras ciclo», expresó.
Plan de consolidación de códigos
La ambiciosa consolidación de NFPA de sus normas para socorristas se inicia con cinco nuevos documentos para 2022
nfpa.org/errs
¿Requiere un vehículo de bomberos y rescate en un aeropuerto un tipo de iluminación de emergencia diferente a la de un camión escalera de un cuerpo de bomberos, o un camión de combate de incendios forestales, o incluso una ambulancia? ¿O una luz de emergencia que funciona en un tipo de vehículo servirá para todos ellos?
Estos son los tipos de interrogantes que surgen cuando se intenta combinar múltiples normas que «antes vivían cada una en su propio universo» en un solo documento, dice Ken Holland, personal de enlace del proyecto propuesto para NFPA 1900, Norma para Vehículos de Rescate y Combate de Incendios de Aeronaves, Vehículos Automotores de Bomberos, Vehículos de Bomberos para Incendios Forestales y Ambulancias Automotrices. «Rápidamente uno comprende, ‘De acuerdo, ¿necesitamos tener diferentes requisitos para la iluminación de emergencia en todos estos vehículos?’».

La nueva NFPA 1140, Normas para Protección contra Incendios Forestales, combinará cuatro normas existentes en un único documento. GETTY IMAGES |
Ese tipo de pensamiento fue uno de los principales impulsores del Plan de consolidación de documentos de respuesta a emergencias y seguridad de los socorristas (Emergency Response and Responder Safety Document Consolidation Plan) de NFPA, que Holland está supervisando. A lo largo de los próximos cinco años, el proyecto pretende racionalizar significativamente el amplio conjunto de normas para socorristas de la organización, consolidando aproximadamente 90 normas distintas en 29 documentos nuevos. NFPA 1900, por ejemplo—cuya edición 2024 está prevista para ser publicada en 2023—combinará lo que antes eran cuatro normas distintas, una para cada tipo de vehículo para emergencias, en una única norma.
Según el plan de consolidación, los primeros cinco de estos nuevos documentos combinados, todos ellos ediciones de 2022, serán publicados por el Consejo de Normas de NFPA ya en agosto, y podrían presentarse a los miembros con derecho a voto en la Reunión Técnica de NFPA de junio si se presentan mociones de enmienda que cumplan los requisitos. Se incluyen documentos sobre materiales peligrosos, combate de incendios forestales, comunicaciones de los servicios de emergencia, sets de protección y búsqueda y rescate técnicos (ver «Primer lote» a continuación). En su conjunto, estos cinco nuevos documentos contienen información que hasta hace poco estaba repartida en 15 normas diferentes. La página web nfpa.org/errs (en inglés) muestra el cronograma completo y el proceso de consolidación y se incluyen enlaces para la lectura de los proyectos completos de cada documento.
Source: https://nfpajla.org/archivos/edicion-impresa/nfpa-desarrollo-adopcion-de-normativa/1903-clase-de-2022

El proyecto de consolidación pretende resolver y mejorar diversas cuestiones, dijo Barry Chase, responsable de las normas de respuesta a emergencias y seguridad de los socorristas de NFPA. Al agruparse y combinarse los documentos relacionados, destinados a los socorristas, dijo, los usuarios tendrán toda la información que necesitan a su alcance en un único libro. Además, los comités que crean y revisan estos documentos dispondrán de un proceso más ágil y eficiente, y podrán, eventualmente, eliminar las redundancias o la información incongruente que se ha colado en los documentos a lo largo de los años.
«A medida que ha pasado el tiempo, han surgido nuevos e importantes proyectos de normas que demandan nuestra atención, pero cada vez que agregábamos algo nuevo, no quitábamos nada y la cantidad de normas seguía aumentando», dijo Chase. «Este proyecto de consolidación equilibrará eso al reunir algunas de estas normas en un libro de mayor volumen, haciéndolo un poco más manejable y permitiendo a NFPA hacer más».
Además de las cinco nuevas normas consolidadas que se publicarán en agosto, otras seis normas combinadas serán publicadas en 2022 y 2023. Posteriormente, se publicarán otras cuatro normas en 2023, seis en 2024 y ocho normas finales combinadas en 2025 y 2026.
Un proceso de aprendizaje
Si bien son significativos los beneficios a largo plazo de la consolidación, el proceso de combinar múltiples normas relacionadas, cada una con su propio grupo de expertos técnicos, ha planteado algunos interrogantes logísticos. ¿Debería fusionarse completamente el contenido de los documentos separados y reinventarse? ¿Deberían fusionarse también los comités técnicos? Si no, ¿cómo se trataría el conflicto de opiniones?
Finalmente, NFPA ha optado por mantener simplificada la cuestión. Cada norma anterior sujeta a consolidación comenzará como una sección independiente del nuevo documento combinado, y los comités técnicos individuales permanecerán separados y a cargo de su propio material. Cada comité es, entonces, libre de racionalizar, combinar y reorganizar su material según lo considere oportuno. Este enfoque funciona porque «nueve de cada diez veces, una sección no se entrecruza con el resto del material del documento», dijo Holland. «Los comités entienden dónde están sus pretiles y dónde empieza y termina el material del que son responsables».
Ha habido, sin embargo, algunos temas complejos. Por un lado, cada norma tiene tres capítulos introductorios: Administración, Documentos de referencia y Definiciones. Uno de los comités técnicos se encarga de fusionar estos capítulos de los distintos documentos en uno solo. En algunos casos, el mismo término se define con ligeras variaciones entre los documentos. En otros casos, puede haber pequeñas contradicciones o redundancias entre las secciones, como ocurre con el tema de la iluminación de emergencia en NFPA 1900. En ese caso, los comités implicados formaron un grupo de tareas para el tratamiento del tema y, luego de muchas horas de debate, resolvieron la elaboración de una norma común para la iluminación de emergencia que puede aplicarse a cada uno de los vehículos contemplados en la norma. El resultado final es un documento depurado y de más fácil aplicación.
«En general, los miembros del comité se han mostrado amistosos y abiertos a todo este proceso. Cuando efectivamente surgen determinadas circunstancias, se trata simplemente de trabajar e intentar encontrar una solución», dijo Holland. «En los casos en los que tenemos varias definiciones para lo mismo, sencillamente nos planteamos, ‘de acuerdo, ¿cuál es la mejor?’ No podemos tener tres definiciones distintas para un neumático. Se trata de debatirlo y arribar a una solución».
Chase y Holland admiten que, al principio, hubo cierta aprensión por parte de los miembros del comité sobre lo que podrían significar los cambios para la consolidación y sobre cómo podría funcionar el proceso. Pero a medida que se iban celebrando las reuniones para el tratamiento de los proyectos de este primer grupo de normas, muchos de esos temores se disiparon y han quedado claro los beneficios de este nuevo enfoque.
«Una vez que empiezan a ver los documentos juntos, empiezan a creer en algunas de las sinergias», expresó Chase. Citó una nueva propuesta de documento consolidado, NFPA 470, Norma sobre Manejo de Incidentes con Materiales Peligrosos/Armas de Destrucción Masiva (ADM) para Socorristas, que reúne tres normas en un solo documento. El comité, dijo, combinó y consolidó los requisitos de cualificación profesional y competencias, que antes estaban en diferentes normas, y reordenó los capítulos de una manera más lógica. «Los miembros del comité pronto se transformaron en partidarios, pero tuvieron que pasar por el proceso para poder ver los beneficios», dijo Chase. «Ahora también estamos empezando a ver algo de eso con los documentos del grupo dos, sobre los que se han terminado las reuniones de tratamiento de los primeros proyectos. Están empezando a ver cómo la unión de estas diferentes normas puede dar lugar a un enfoque más integral, en lugar de tener un libro diferente para cada parte del mismo tema».
En última instancia, la mayor promesa de la consolidación es cuando los usuarios de las normas ven esa misma sinergia, dijo Holland. Actualmente, un solo tema, como el combate de los incendios forestales, está repartido en cuatro documentos para abarcar los diferentes aspectos del manejo del fuego, el desarrollo de tierras y las cualificaciones profesionales. Dentro de unos meses, sin embargo, las jurisdicciones de áreas propensas a incendios forestales solamente necesitarán un libro: NFPA 1140, Normas para Protección contra Incendios Forestales. Pronto ocurrirá lo mismo con temas como equipos de protección personal, búsqueda y rescate técnicos, evacuación masiva y muchos más.
«Esa fue realmente la principal fuerza motriz para consolidar los documentos», dijo Holland. «¿Qué podemos hacer para que el usuario final obtenga el mayor beneficio? Creo que tener un libro para cada tema, en lugar de varios, va a facilitar mucho las cosas».
JESSE ROMAN es editor asociado en NFPA Journal y ANGELO VERZONI es redactor en NFPA Journal.