
Según comentarios publicados en Twitter, el humo podía ser visto en Arlington, Virginia, a más de cinco millas de distancia. «Pensé que estábamos siendo atacados», escribió un espectador.
No se trataba de un ataque, sino de un incendio en el techo de un edificio de gran altura en construcción.
En promedio, los cuerpos de bomberos de los Estados Unidos responden a un incendio en un edificio en construcción o en remodelación importante cada hora y media. Estos sitios están notoriamente repletos de combustible, como amontonamiento de basura y excedentes de materiales de construcción. Si a eso le agregamos las no pocas fuentes de ignición, que van desde equipos de calefacción y cocción hasta actividades de soldadura y otras actividades de trabajo en caliente, así como el hecho de que los sistemas de protección contra incendios, como rociadores, pueden no estar todavía activos. Todo ello suma para dar lugar a un entorno propicio para un devastador incendio.
Incendios de ese tipo aparecen en los titulares todas las semanas, a menudo después de haber arrasado enormes complejos multimillonarios a punto de ser concluidos. Menos de un mes después del incendio de DC, cuatro edificios de apartamentos en construcción en Dallas fueron destruidos por un incendio; un incendio intencional en un edificio en construcción en Seattle provocó daños por un valor estimado de US$3 millones; y un complejo Hampton Inn & Suites en construcción en Ontario, Canadá, que fue considerado una pérdida total después de que las llamas arrasaran el lugar en mitad de la noche.
«La construcción es un punto vulnerable en el ciclo de vida de un edificio, simplemente debido a la gran cantidad de cambios que se producen en la estructura», dijo Kevin Carr, especialista sénior en protección contra incendios de edificios de NFPA. Carr es personal de enlace de NFPA para NFPA 241, Norma para la Protección de Operaciones de Construcción, Alteración y Demolición, que describe los pasos necesarios para mantener las obras en construcción a salvo de incendios.
Si bien NFPA 241 existe desde hace más de 80 años y se menciona en dos de los códigos más utilizados de NFPA—NFPA 1, Código de Incendios, y NFPA 101®, Código de Seguridad Humana—Carr dijo que muchas personas desconocen el documento o sus requisitos. «Cuando he tenido la oportunidad de hablar con las partes interesadas, sean autoridades competentes o contratistas, su conocimiento de NFPA 241 tiende a inclinarse hacia uno de dos extremos—o bien tienen un conocimiento bastante detallado de la norma, o bien nunca la han aplicado», dijo. El conocimiento de otras normas NFPA parece más equilibrado entre las partes interesadas, agregó Carr.
Carr y otros expertos en seguridad de edificios esperan que una versión actualizada de NFPA 241, que entró en vigor en abril, contribuirá a que la protección contra incendios sea mejor comprendida y más accesible en estos lugares. Los nuevos programas de capacitación de NFPA y otros recursos educativos relacionados con la protección contra incendios en edificios en construcción o remodelación también podrían ayudar a reducir los incidentes de incendio. El 22 de junio, como parte de la Serie de Conferencias del 125º Aniversario de NFPA, un evento de un día de duración de presentaciones educativas virtuales sobre protección contra incendios y seguridad humana en edificios incluirá dos presentaciones relacionadas con la protección contra incendios en obras en construcción, entre ellas una sobre trabajos en caliente y otra sobre seguridad en las obras en general. La jornada estará disponible bajo demanda hasta el 22 de junio de 2022 e incluye la opción de subtítulos en español.
«Estoy realmente orgulloso de la última edición de la norma», dijo Bruce Campbell, ingeniero en protección contra incendios y vicepresidente de Jensen Hughes, que preside el comité técnico de NFPA 241. «Creo que realmente va ser ampliamente adoptada, y espero que sea una gran ayuda».
Una norma renovada
Al igual que Carr, Campbell dijo que muchas autoridades competentes no hacen cumplir NFPA 241 debido a que no saben mucho sobre la norma. Pero no es el conocimiento el único problema. Algunos propietarios de edificios y contratistas de la construcción temen que la norma pueda obstaculizar la construcción haciendo que sea más lento o más complicado concluirla, expresó Campbell.
«Puede que la vean como algo que los limitaría o que sería demasiado complejo aplicar», dijo. «Pero es necesario que empiecen a verla holísticamente y aprendan a utilizarla para su beneficio. Nadie quiere que ocurra un incendio de grandes dimensiones».
El temor a costos de construcción más altos es otro factor que impide la aplicación de NFPA 241, dijo Dave Chandler, vicepresidente de salud, seguridad y calidad ambiental de Davis Construction, con sede en Maryland. «Pero es necesario que se entienda que los requisitos descritos en NFPA 241 están allí incluidos por una buena razón», dijo. «Creo que tienen que aprender más sobre la norma y que las normas evolucionan por una razón. Una apropiada inversión en seguridad minimiza el riesgo de catástrofes y pérdida de vidas».
Las pérdidas directas de propiedades por los aproximadamente 6,500 incendios que ocurren cada año en edificios en construcción o remodelación solamente en los Estados Unidos ascienden a más de US$400 millones, según datos de NFPA más recientes. Costosos incendios en obras en construcción también ocurren con regularidad fuera de los Estados Unidos. En enero, en un incendio ocurrido en una instalación que se estaba construyendo para la producción de la vacuna contra COVID-19 en la India murieron cinco personas y provocó pérdidas por una suma estimada de US$130 millones.
Source: https://nfpajla.org/archivos/edicion-impresa/lugares-de-reuniones-publicas-discotecas/1900-la-seguridad-es-lo-primero

La edición 2022 de NFPA 241 incluye varios cambios diseñados para facilitar la aplicación de la norma y reducir algunos de estos temores. Un cambio importante admite que los sistemas de rociadores instalados temporalmente en edificios en construcción no cumplan con los códigos y normas NFPA—más precisamente, con NFPA 13, Norma para la Instalación de Sistemas de Rociadores.
«El cambio nos ofrece una buena manera de poner en servicio un sistema de rociadores rápidamente», dijo Campbell. «Aunque no cumpla en su totalidad con NFPA 13, sigue estando ahí y puede, potencialmente, marcar la diferencia en estos incendios».
En julio de 2020, la Asociación Nacional de Rociadores contra Incendio (National Fire Sprinkler Association o NFSA) publicó un artículo en el que se reconocía el problema del pasado requisito de cumplimiento descrito en NFPA 13 de NFPA 241. «NFPA 241 difiere de NFPA 13 en el tema de la instalación, aunque muchos de los requisitos de NFPA 13 no pueden ser cumplidos hasta las etapas finales de la construcción o en un edificio terminado y en funcionamiento con un certificado de ocupación», mencionaba NFSA. Al mismo tiempo, sin embargo, NFSA planteó el interrogante de si los sistemas que no cumplen con NFPA 13 pueden ser plenamente fiables.
Otros han planteado inquietudes similares. En una entrevista con Fire Engineering en febrero, Jeff Hutchens, antiguo director de seguridad de la empresa constructora multinacional Avalon Bay, calificó la idea de poner en marcha sistemas de rociadores que no cumplan totalmente con la normativa «como algo destinado al fracaso», citando riesgos como la activación involuntaria de los rociadores por los equipos de calefacción de la construcción, el congelamiento de las tuberías y daños en los rociadores por las actividades de construcción.
Pero para los miembros del comité técnico de NFPA 241, los beneficios superan los riesgos. Además, Carr señaló que el cambio puede no ser tan drástico como parece, ya que las autoridades competentes ya están autorizadas a hacer excepciones a los códigos y normas cuando lo consideren apropiado. «La autoridad competente determina el cumplimiento del código y se le concede una amplia autoridad para exigir su cumplimiento de diversas maneras», dijo. «Esto contribuye a garantizar la seguridad tanto de quienes trabajan en la obra como de los futuros ocupantes».
Según Fire Engineering, conseguir que los sistemas de rociadores se activen lo antes posible en las obras en construcción es algo que las autoridades competentes valoran mucho y que ya están haciendo—incluso si esto significa idear soluciones creativas y temporales.
«Hemos tenido un éxito excelente al trabajar con nuestros contratistas locales de sistemas de rociadores y de la construcción en West Des Moines [Iowa] para que los sistemas de rociadores secos de áticos sean conectados con la mayor prontitud en el proceso de construcción del edificio con las conexiones temporales de los cuerpos de bomberos que nuestros bomberos puedan utilizar y disponer de un suministro de agua durante un incendio», dijo el jefe de bomberos de West Des Moines, Mike Whitsell, a la revista. «La mayoría de las instalaciones de rociadores se inician desde el ático y se dirigen hacia abajo durante el proceso de construcción, por lo que se cuenta con la debida infraestructura desde el principio. Y aunque el suministro de agua urbano aún no esté conectado al sistema, los hidrantes están activos, de manera que nuestros camiones de bomberos se transforman en el montante de los sistemas de rociadores».
Otros cambios en la norma incluyen una nueva sección que contribuye con las autoridades competentes en la aplicación, un nuevo capítulo sobre la construcción de grandes estructuras de madera, requisitos mejorados para la creación de un programa de prevención de incendios para obras en construcción, y referencias a los documentos de NFPA que se centran en la protección contra incendios de los edificios históricos. (Puede obtenerse más información sobre estos cambios en «Los golpes continúan» en la edición de marzo 2021 de NFPA Journal en Español)
‘Responsabilidad de todos’
Como complemento de la versión actualizada de NFPA 241 de este año, hay una serie de recursos educativos de NFPA relacionados con la protección contra incendios en edificios en construcción o remodelación, entre los que se incluyen nuevos cursos en línea sobre la edición 2019 de NFPA 241, los fundamentos de la protección contra incendios en obras en construcción y las acreditaciones para gerentes de programas de prevención de incendios (Fire Prevention Program Manager o FPPM).
La capacitación FPPM cubre una carencia que ha existido durante años. Si bien NFPA 241 requiere desde hace tiempo que los proyectos de construcción cuenten con un programa de prevención de incendios y un FPPM que supervise ese programa, no había hasta la publicación de esta capacitación ninguna manera de garantizar que estas personas tuvieran los conocimientos suficientes para llevar a cabo la tarea. «Creo que ahora vamos a ver a algunas jurisdicciones diciendo a los contratistas: ‘Bien, ¿quién es su FPPM, y si tiene la capacidad de simplificar la función tal y como lo requiere la norma?’» dijo Carr.
Lo destacable de la capacitación en FPPM y de los fundamentos de la capacitación en protección contra incendios en obras en construcción es que no se basan en el lenguaje de los códigos NFPA, sino en los conceptos generales relativos a los riesgos de incendio que existen en las obras en construcción. Se trata de una distinción importante que hará que la instrucción sea más accesible para una mayor cantidad de personas, incluidos los trabajadores que realizan actividades cotidianas en las obras en construcción.
«Todos son responsable de la protección contra incendios en el sitio de la obra», dijo Shawn Mahoney, ingeniero de NFPA que colaboró en el desarrollo de las nuevas capacitaciones. «Se puede tener el mejor plan de prevención de incendios del mundo, pero si no se cuenta con personas debidamente capacitadas para hacerlo cumplir y los trabajadores de la obra no entienden cuál es su rol en el plan de prevención de incendios, todo se desmorona. Sólo eres tan fuerte como tu eslabón más débil». Esta idea se ve reforzada por el concepto del Ecosistema de Protección contra Incendios y Seguridad Humana de NFPA, que remarca la necesidad no solamente de utilizar y cumplir con códigos y normas como NFPA 241, sino también de contar con una mano de obra cualificada para llevar a cabo actividades de construcción potencialmente peligrosas.
Valerie Ziavras, otra ingeniera de NFPA que colaboró en el desarrollo de las capacitaciones, se mostró de acuerdo y comparó los fundamentos de la capacitación en protección contra incendios en obras en construcción con el exitoso programa en línea de certificación sobre seguridad de los trabajos en caliente de NFPA (disponible en español). «Es similar en cuanto a que alienta a todos los que están en una obra en construcción a responsabilizarse por la protección contra incendios, pero en lugar de centrarse solamente en los trabajos en caliente, va más allá y aborda todos los demás peligros», dijo. [Para obtener más información sobre el programa en línea de certificación sobre seguridad de los trabajos en caliente de NFPA, ver «Todavía caliente«.
La capacitación de los FPPM, en particular, es lo que le interesa a Chandler, quien dijo que estaba ansioso por llamar la atención de un grupo de profesionales de la seguridad conocido como el Grupo de Liderazgo en Seguridad de los Contratistas Generales de DC (DC General Contractor Safety Leadership Group), que representa a unas dos docenas de contratistas de la construcción en el área de Washington, DC. «Si se observa la norma, requiere que los propietarios de edificios participen en la designación de un gerente de programa de prevención de incendios, por lo que creo que esta capacitación será extremadamente valiosa, no solamente para los contratistas generales como Davis, sino también para los propietarios involucrados en los proyectos», dijo Chandler.
Expertos como Chandler aspiran a que los eventos virtuales, las capacitaciones en línea y una NFPA 241 renovada comenzarán a reducir la cantidad de incendios de edificios en construcción o remodelación.
«Creo que NFPA 241 y todos estos recursos relacionados están infrautilizados», dijo, y añadió que, tras casi dos décadas en la industria de la construcción, descubrió NFPA 241 hace solamente unos seis meses. «Todos podemos beneficiarnos de la implementación y aplicación de esta norma. Adopta un enfoque realmente proactivo en la minimización del riesgo, y cualquier construcción, reforma o demolición tiene ese riesgo, siempre presente, de incendio».
ANGELO VERZONI es redactor en NFPA Journal.